Las cláusulas abusivas hipotecas son aquellas cláusulas contractuales no negociadas individualmente, de carácter predispuesto, cuya incorporación haya sido dispuesta de forma unilateral por una sola de las partes en el contrato hipotecario. Debes tener en cuenta que los préstamos hipotecarios se rigen por contratos de adhesión, en los que el ciudadano medio se ve en desventaja frente a los bancos. A la hora de firmar, muchas veces hay pequeñas piedras en el camino impuestas por quien concede el préstamo que acaban derivando en violaciones de los derechos de los consumidores. La Ley prevé una serie de instrumentos para reclamar estos atropellos, por lo que deberás estar debidamente asesorado por un equipo legal de garantías. ¿Quieres saber más sobre estas cláusulas para saber cómo hacerles frente?
Todos los contratos hipotecarios son diferentes, pero al mismo tiempo, dentro de su diversidad, comparten una serie de elementos que, por fuerza mayor, estarán presentes. Las partes más importantes son las siguientes:
Examinar con lupa todas estas partes es imprescindible para vigilar que no se añadan cláusulas abusivas. Hipotecas de todo tipo y condición pueden ser objeto de ellas. Pero ¿cómo localizarlas? Desde la crisis de 2008 se han multiplicado los juicios hipotecarios. La Justicia ha ido dando paulatinamente la razón a los afectados, pero se trata de un proceso largo y complicado que exige de la mejor asistencia legal. Algunas de las cláusulas abusivas que los letrados han ido encontrando en cada una de las partes antes referidas son las siguientes.
El Tribunal de Justicia de la Unión Europea (TJUE) sentenció el 21 diciembre de 2016 contra esta manipulación artera. La cláusula suelo puede elevar el coste mensual de la hipoteca en 200 ó 300 euros. ¡Que no te la cuelen!
Este método se basa en incluir en los prestamos hipotecarios cláusulas por las que el banco establece un redondeo sólo al alza (nunca a la baja) cuando se trata de calcular los intereses. Muy oportuno… y también injusto.
Uno de los índices más comunes en las hipotecas de tipo variable es el euríbor. La manipulación del euríbor por varios bancos ha tenido como conclusión una multa millonaria impuesta por la Comisión Europea.
Esta cláusula empuja a los que caen en sus redes a renunciar a los juzgados del propio domicilio. La consecuencia es que consienten el sometimiento a los juzgados del lugar estipulado por el banco. Esta imposición al cliente es muy habitual e impugnable ante la ley, ya que viola los intereses del afectado.
Se trata de una medida que permite a la entidad bancaria estipular como vencido el préstamo antes del plazo pactado. Esto les conduce a reclamar antes de tiempo el importe de todo lo adeudado cuando se dan algunas condiciones, tales como el impago de las cuotas.
Estas son algunas de las cláusulas abusivas más comunes, pero hay más. Para saber si estás siendo blanco de sus efectos, y disponerlo todo judicialmente para dar la batalla, necesitas asesorarte legalmente por los mejores especialistas.