La liquidación de gananciales: cómo se hace y qué efectos tiene
En estas líneas vamos a contarte cuándo y cómo se puede o se debe proceder a la liquidación de gananciales. Así, sabrás cómo se desarrolla el procedimiento, por si tienes que enfrentarte a ello ahora o en el futuro.
El régimen económico matrimonial de gananciales es la comunidad integrada por los bienes que provienen de las ganancias de cada uno de los cónyuges. Aparte, también se incluyen los que se originaron por el rendimiento tanto del patrimonio ganancial como del patrimonio privativo de cada uno.
¿Qué causas disuelven la sociedad de gananciales?
Una comunidad de bienes gananciales se disuelve, lógicamente, cuando se disuelve también el matrimonio. Y esto puede suceder por diversos motivos:
- Cuando uno de los cónyuges fallece.
- Porque ambos se divorcian.
- Al declararse el matrimonio nulo.
- Si los dos deseen establecer un régimen distinto, otorgando capitulaciones matrimoniales.
También puede disolverse a instancia de una de las partes, en una serie de supuestos:
- Si se declara la incapacitación de uno de los cónyuges.
- Cuando uno de los dos se declara en quiebra.
- Si se ha cometido fraude contra los gananciales.
- En caso de llevar los cónyuges separados de hecho más de un año.
¿Cómo es el proceso de disolución?
En primer lugar, la liquidación de la sociedad de gananciales comienza por saber si hay o no bienes gananciales en el matrimonio. Y, si los hay, se procede al reparto de una mitad a cada cónyuge. Aparte, por supuesto, de los bienes privativos que cada uno pueda tener.
¿Quieres saber cuáles son las fases de esta operación? ¡Toma nota!
1. Realización del inventario
Este inventario contendrá el valor de todos aquellos bienes que forman parte de la sociedad de gananciales. Además, se incluirán aquí también las deudas.
Has de saber que el activo y el pasivo se concretan y valoran siguiendo una serie de reglas legales bastante complejas. Por eso, es importante que tanto tú como la otra parte estéis acompañados de un buen abogado. O bien que cada uno contrate a un profesional que se encargue de defender sus intereses.
2. Pago de las deudas
Se procede, antes de nada, a pagar las deudas pendientes de la sociedad, teniendo en cuenta que tienen prioridad las alimenticias que sean gananciales. Se tendrá presente, asimismo, que los posibles acreedores tienen derechos de cobro, y que estos se regulan igual que cuando se reparte una herencia.
3. División y reparto de los bienes en común
Cuando ya se han liquidado las deudas, lo que sobra es el haber o patrimonio de la sociedad. Este haber se divide en dos mitades y se otorga una mitad a cada cónyuge. Y, si uno de los cónyuges ha fallecido, su mitad se asigna a sus herederos.
Los bienes de uso personal y el derecho de alimentos
Cada cónyuge tiene derecho a disponer de sus bienes personales y, si el otro cónyuge ha muerto, también de su vivienda habitual. Lo mismo sucede con los locales donde el cónyuge realizaba su actividad profesional.
Por último, hay que decir que mientras dure todo este proceso, las dos partes pueden reclamar una pensión de alimentos, si carecen de recursos para vivir por su cuenta. Esto no sería más que un anticipo del patrimonio que posteriormente le sería adjudicado.
El papel de un abogado en la liquidación de gananciales
Como has podido comprobar, este proceso es bastante complejo y enrevesado, sobre todo si no se realiza de mutuo acuerdo. Por eso, es uno de esos asuntos legales en los que se hace totalmente imprescindible el asesoramiento especializado.
Cuando tengas que enfrentarte a un proceso de liquidación de bienes de una sociedad de gananciales, recurre a tu tuAppbogado. Así, lo harás asistido por un abogado especialista en esta materia.